Desde hace casi 50 años, Palmelita es sinónimo de calidad. Una empresa familiar nacida en 1968 como pastelería innovadora que ahora quiere hacerse un hueco a nivel internacional gracias a sus confituras elaboradas artesanalmente en su obrador de Bajamar, con frutas y verduras de temporada de las Islas Canarias.
Hace cuatro años que en Confituras Palmelita entendieron que sus productos merecían un impulso tras la buena aceptación en los lineales de los supermercados canarios (Spar, Hiperdino, El Corte Inglés o Supercor). Así, en 2014 se completó la expansión a todas las Islas y las principales ciudades españolas, y desde el pasado 15 de junio ya se pueden adquirir en las más importantes ciudades de Alemania, luchando con los productos de las multinacionales británicas y francesas.
Su secreto está en el origen de la materia prima, tratando directamente con el agricultor para obtener la mejor fruta en su óptimo punto de maduración y, por ende, la mejor confitura. “Ofrecemos un producto premium. Nuestra tierra produce frutas de temporada de una excelente calidad. Por eso, hemos querido respaldar los cultivos locales elaborando las confituras con la mejor selección de materias primas. Tenemos una larga trayectoria como maestros confiteros, que elaboramos de manera artesanal, con nuestras fórmulas, sin conservantes ni colorantes, por lo que el aroma y la intensidad natural de su sabor se conserva al máximo”, afirma Sebastian, nieto de los fundadores.
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